Elije bien a qué prestarle atención.

Epicteto, en uno de sus Discursos, nos advierte que hemos de “mantenernos en guardia sobre nuestras percepciones”, ya que “no es algo pequeño lo que están protegiendo, sino tu respeto, confianza y firmeza, tranquilidad, libertad del dolor y el miedo, en una palabra, tu libertad. Y he de decir que tiene toda la razón Epicteto.

Mantenernos en guardia sobre nuestras percepciones implica elegir bien qué queremos, necesitamos o debemos percibir y que no. En el día a día hay muchas cosas que ocurren ajenas a nosotros y por las que nos enojamos, que si ha subido el precio de la luz o que tu vecino no te ha sujetado la puerta para que pases al entrar al edificio. Déjalo estar. ¿Verdaderamente estas situaciones merecen tu atención? ¿Debes enfadarte por estas acciones? Pues lo que un filósofo estoico de la época nos diría es que no, ya que no tenemos el control sobre estas decisiones que residen en las mentes de algunos. Pero hay algo más grande que eso.

Un gran cambio, un cambio de verdad al que muchos tememos. Y, es que ¿Cuánta gente recibe broncas de sus jefes o entrenadores en trabajos o equipos deportivos en los que realmente no desean estar? A la gente le da miedo el cambio. No se atreven a dejar ese trabajo que no les llena por el qué dirán de un “loco” que dejo ese puesto tan ansiado por otros para ganar menos dinero o a cortar esa amistad con la persona que no pueden ni ver por los años que llevan siendo amigos. Ante cada situación que te irrite en la vida has de preguntarte. ¿De verdad es esto lo que quiero? La respuesta a esta pregunta normalmente se resolverá con un sí o un no, pero en algún momento de tu vida tendrás que hacer un autoexamen profundo de tu propósito y las situaciones que te alejan o te acercan a él.

Anotación: Si una situación te produce ira o ansiedad o alguna emoción negativa, no quiere decir que no sea el sitio donde verdaderamente quieres estar o donde debes estar. ¿De verdad crees que figuras como Michael Jordan o Pelé no pasaron por momentos difíciles en los que se plantearon si de verdad debían seguir peleando por llegar a lo más alto de su deporte? Pues la respuesta es que al igual que todos nosotros, cuando persigamos nuestro propósito o cualquier objetivo tendremos momentos de incertidumbre, pero esto no quiere decir que no debamos continuar haciendo eso.

Para practicar día a día

La próxima vez que una situación te altere, enfade o te moleste, plantéate si de verdad merece la pena dirigir tu foco de atención a eso. Plantéate si de verdad estás en el lugar indicado cuando recibes estas emociones negativas.

Estoy seguro que de esta forma podrás encontrar algo más de tranquilidad en tu vida y luchar por las cosas que sí merecen la pena y dependen de ti.

Esta Newsletter está basada en el libro "Diario para Estoicos" de Ryan Holiday y Stephen Hanselman.